La importancia de una buena nutrición con Sonia Ruiz
Una correcta nutrición se basa en unos hábitos alimenticios adecuados y es fundamental para el óptimo funcionamiento de nuestro cuerpo. Si la persona implementa frecuentemente un desequilibrio nutricional, no gozará ni de bienestar ni de buena salud, más bien estimulará a la fatiga, a la debilidad del sistema inmunitario y al aumento del riesgo de ciertas enfermedades vinculadas a la dieta como las cardiovasculares y diabetes, entre otras. Si además su estilo de vida es sedentario se agravan dichas consecuencias. Así que, si el objetivo es iniciar el camino hacia un estilo de vida saludable, la combinación clave es la buena nutrición junto con ejercicio físico regular.
¿Cómo es una dieta saludable?
Una dieta saludable debe ser equilibrada, variada y suficiente.
[if !supportLists]• Equilibrada: Ha de aportar en su justa medida todos los nutrientes necesarios.
[if !supportLists]• Variedad: Al no existir ningún alimento que ofrezca todos los nutrientes en sus cantidades óptimas, hay la necesidad de una diversidad alimentaria para alcanzar un mejor estado nutricional.
[if !supportLists]• Suficiente: Es necesario conseguir un equilibrio calórico (energético).
Como pautas básicas para llevar a cabo una dieta sana, se recomienda tener preferencia por el aceite de oliva virgen extra, controlar el uso de sal, hacer un consumo muy ocasional de carnes rojas, procesadas y embutidos, alimentos ultraprocesados, bollería industrial, azúcar refinado y productos que lo contengan, y vigilar con las grasas no saludables como las saturadas o trans.
Es vital mantenerse hidratado, beber mínimo litro y medio de agua es una tarea que no se puede olvidar. Uno de los signos de la deshidratación es la sed, así que no se ha de esperar a sentir dicha sensación, puesto que cuando surge es que el proceso de deshidratación ya ha empezado.
Otro factor importante es realizar varias ingestas al día (5 ó 6) para repartir el gasto calórico adecuadamente a lo largo de toda la jornada.
Para mantener al máximo el valor nutricional de los alimentos y sus texturas, es aconsejable emplear técnicas culinarias saludables tales como el cocinado al vapor, hervidos, wok, horno …
El uso de suplementos y complementos se aconseja en caso que el profesional de la nutrición lo considere necesario.
¿Qué dieta seguir para alcanzar un estado nutricional idóneo? ¡La dieta mediterránea! Ofrece un patrón alimentario saludable y brinda múltiples beneficios para nuestra salud, además de sabrosa.
¿Qué son los nutrientes?
La alimentación de cada individuo debe contener diariamente una cantidad adecuada de los diferentes macro y micronutrientes para abastecer sus necesidades fisiológicas.
Cuando hablamos de macronutrientes nos referimos al agua y a aquellos nutrientes distribuidores de energía (kilocalorías), que son los hidratos de carbono, proteínas, y grasas. Los micronutrientes, también conocidos como oligonutrientes, no son productores de energía, engloban las vitaminas y los minerales, su consumo en cantidad es menor que los macronutrientes, pero no por ello carecen de importancia, ya que son necesarios para el buen funcionamiento de las tareas orgánicas.
¿Qué son las Kilocalorías?
Cuando hablamos de Kilocalorías (Kcal.) nos referimos al combustible, a la energía necesaria para que el cuerpo lleve a cabo las funciones vitales como digerir, respirar… y para realizar esfuerzos físicos.
De la misma manera, el valor energético de un alimento se mide en kilocalorías. Como la caloría resulta un valor minúsculo, en términos dietético-nutricionales se emplea la medida Kilocaloría, siendo 1 Kcal equivalente a 1000 calorías.
La energía de la dieta dependerá del Gasto Energético Total, que es principalmente la suma del metabolismo basal y del ejercicio que ejerza el individuo.
Como se comentaba anteriormente, los carbohidratos, proteínas y grasas aportan energía. Veamos cuanto generan cada uno de ellos:
[if !supportLists]• 1 gramo de hidratos de carbono aporta 4 Kilocalorías
[if !supportLists]• 1 gramo de proteínas aporta 4 Kilocalorías
[if !supportLists]• 1 gramo de grasas aporta 9 Kilocalorías
Todos los alimentos brindan una combinación de estos tres macronutrientes, y su valor energético estará sujeto al que predomine más.
¿Porqué es necesario adaptar la dieta?
Es primordial saber que NO existen dietas generalizadas. Las necesidades nutricionales de cada persona se ven influenciadas por diversos factores, como el sexo, edad, peso, si se padece alguna enfermedad, la situación fisiológica en que se encuentra (etapa de crecimiento, embarazo, lactancia, menopausia/andropausia…), composición corporal, y actividad física. Por este motivo, es primordial que el/la nutricionista cubra todas las demandas y adapte la dieta a las necesidades cada persona.
Dieta y éxito en la práctica deportiva
Si el objetivo es un rendimiento mayor y una mejor recuperación, la dieta cobra la misma importancia que un buen plan de entrenamiento.
Si uno de estos pilares fracasa, los resultados deseados no se alcanzarán, o no serán tan exitosos como podrían ser.
Las demandas nutricionales dependerán del tipo, frecuencia, y duración de actividad física que se desempeñe.
Partiendo de una dieta equilibrada, se reajustará atendiendo a los requerimientos del deportista y se matizarán las necesidades nutritivas según el momento en que se vaya a realizar ejercicio, es decir, lo necesario a ingerir antes, durante y después de la práctica deportiva.
