El sufrimiento es un arma de poder...
El sufrimiento existe, es una sensación nada placentera en principio... A nadie le apetece sufrir en exceso pero es interesante saber que el sufrimiento existe como un camino hacia la propia superación.
Si enfocamos el sufrimiento tan sólo como una experiencia a consecuencia de un acción, cada vez que se produzca esa acción repercutirá en un proceso de connotaciones desagradables ya que esa percepción tiende a crecer de forma progresiva cuando nos vamos habituando a ella y esa fuerza aumenta gradualmente hasta que no nos permite dejar ni un solo hueco a cualquier atisbo de felicidad.
De modo que es fundamental controlar cómo nuestra mente es capaz de gestionar este hábito y evitar culpabilizar a los elementos externos que nos rodean de las consecuencias de nuestra situación actual. Es entonces cuando todo aquello que nos rodea se convierte en enemigo declarado de nuestra integridad física y mental.
Nuestro poder de discernimiento debe crecer de forma equivalente a las percepciones negativas que emiten los elementos que nos rodean para que, una vez alcanzado ese punto, seamos capaces de evitar que esos elementos puedan llegar a dificultar e incluso obstruir, el camino personal que nos hemos marcado.
Cualquier experiencia de sufrimiento no debería rechazarse de antemano. Debe afrontarse con una dosis importante de estabilidad mental que nos permita experimentarlo con la mayor facilidad posible, evitando que la ansiedad y el derrotismo nos dominen ya que entonces este hecho puede ser muy difícil de soportar y puede volverse en contra nuestro. . En muchas ocasiones la causa principal del sufrimiento es la propia negatividad al encarar diversas situaciones con las que nos encontramos en el trayecto. Las dificultades que aparecen pueden convertirse en un ayuda inestimable para potenciar nuestra capacidad de superación y esa situación vivida puede reforzar nuestro nivel de resiliencia y permitirnos alcanzar una estabilidad continua en relación la actitud que pretendemos obtener.
Por tanto, de los momentos de sufrimiento que experimentamos durante el recorrido hemos de extraer los valores positivos que esa fase encierra. Ello ayudará a alcanzar nuevos progresos que pueden ser vitales en nuestras acciones inmediatas.
El sufrimiento existe pero si lo gestionamos correctamente es un arma que nos dará más poder ...