Hace algún tiempo uno de mis grandes objetivos era conseguir la máxima progresión posible en mi faceta primero como runner y después como corredor de Maratón. Era una fase, en mi crecimiento deportivo, en la que la prioridad era recortar segundos al crono, algo normal y absolutamente comprensible…. En esa época algunas personas que me vieron correr me dijeron que yo tenía un gran potencial si me dedicaba a fondo en mi entrenamiento para alcanzar grandes marcas bajo la batuta de un entrenador cualificado…. Pero no lo hice.
Cómo máximo me limité a seguir algún plan para Maratón que copié de internet y que lo interpreté a mi aire. Fui, y siego siendo, un autodidacta que aplica algunos conocimientos de los profesionales y los combino con mis experiencias personales. Y no me arrepiento. Quizás hubiese podido ”romper” el crono a mi nivel pero como contrapartida he de decir que estos años en los que he corrido a mi aire, lo cierto es que lo he disfrutado al máximo y he ido construyendo mi propia filosofía como corredor y, más tarde, como ultarrunner.
Soy un corredor motivado corriendo a mi ritmo y gestando mis propios retos, planeando mis propias aventuras y experimentando nuevas rutas. Así de simple. Adquirir mi propia filosofía como corredor de ultra distancia no ha sido nada fácil. Muchos kilómetros recorridos en una primera fase en múltiples competiciones y después en ultra distancia en solitario. Con momentos explosivos de gran intensidad y con otras situaciones en las que tanto física como mentalmente me he situado a ras de suelo y pensando que estaba en total regresión deportiva.
Después de todo nunca he aspirado a subir al pódium de los vencedores, pero una vez lo he conseguido lo que más valoro no es ese momento de gloria, sino todo el esfuerzo que me ha supuesto recorrer ese camino hasta llegar a este punto culminante y los momentos previos que he compartido con algunas personas y, por supuesto, conmigo mismo.
Realmente, después de centenares de kilómetros por caminos, senderos, valles, montañas y desiertos siempre he pensado que mi objetivo era llegar al punto de destino sintiéndome vencedor y para ello ha sido fundamental correr pensando en vivir intensamente el momento presente.
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